s�bado, 12 de mayo, 2018 - 12:12 hs
MEMORIOSATENSO CRUCE ENTRE MORIA CASÁN Y ANIBAL PACHANO
“La One” y el coreógrafo mantuvieron una dura charla en “Involucrados”
Fiel a su estilo y haciendo honor a su “Lengua Karateca”, Moria Casán disparó al aire de “Involucrados”, un punzante “Aníbal, estoy enojada con vos”, que sorprendió, y mucho, a Pachano.
“La One” estaba en un móvil desde su casa de Parque Leloir y Anibal en el piso del ciclo que Mariano Iúdica conduce por la pantalla de América. Y fue precisamente cuando el coreógrafo saludo a la diva, que sin dejarlo respirar, arremetió: “Aníbal, estoy enojada con vos. Estoy contenta de que estés bien, pero conmigo no te portaste bien. Porque cuando estuive presa en Paraguay y él estaba vivivneod allá ni siquiera me hizo un llamado de teléfono”.
Mientras Pachano intentaba darle su explicación, Moria siguió adelante con su enojo: “Cuando estuviste mal de tu enfermedad te traje a mi casa, te di todo en mi casa… No, no, no… desagradecido, es un mal nacido… No te quiero Pachanito… No te quiero hacer enojar, pero necesito decirlo porque lo que entra tiene que salir”.
Cuando pudo tomar la palabra, Pachano ofreció su versión de lo que pasó en esos tiempos en los que Moria… se sintió dolida: “Cuando yo estaba en Paraguay y pasó todo lo que pasó, yo hablé con Maxi Cardaci y le pregunté cómo estaba Moria y demás. En el transcurso que iba a ir a la cárcel a ver a Moria, apareció una periodista paraguaya desagradable, diciendo que yo le llevaba la droga a Moria…”
Ante la sorpresa y la risa de Moria, que desconocía esta otro costado de los avatares del coreógrafo, Anibal dejó las cosas en claro… “Si, sí… que yo le llevaba la droga a Moria y que si iba, sería el dealer de ella. Una mamarracha, un outlet del Paraguay…”
Con las cartas sobre la mesa y cuando todos pensaban que las cosas quedaban en orden Moria igual le recriminó que no la haya llamado por teléfono… “Aníbal, no sabía nada de esta mamarrachada, me alegra verte bien, pero hay años entre nosotros, somos íntimos y cuando tuviste tu pero momento con Alfano y salió lo de tu enfermedad, yo te calmé… Pasamos muchas cosas, por eso esperaba un llamadiro, como un caballero… estuviste flojo”.
Reconociendo su error, Aníbal le pidió disculpas al aire y después de esta catarsis mediática, fumaron la pipa de la paz, con las cuentas claras y sin rencores.