Carlín Calvo tiene un estado de salud muy delicado desde el último ACV sufrido en 2010. Desde entonces, no puede valerse por sí mismo y requiere del cuidado de varias enfermeras a lo largo del día. Pero en este último año, la situación se hizo insostenible y en su familia hubo que tomar una decisión.
Así fue que, asesorados por los profesionales que lo tratan, decidieron internarlo en una Clínica de Alta Complejidad en la que puedan ayudarlo con sus terapias y tratamientos.