En un nuevo programa de Susana Giménez en su vuelta a la televisión, Lali Espósito estuvo sentada en el living, compartiendo un encuentro inolvidable con la Diva. Hablaron de todo, carrera, amor, celos y una especial anécdota que vivió la cantante cuando era adolescente y recorría el mundo con los "Teen Angels".
Hablando de su historia y de las vivencias que le había deparado su carrera Lali hizo foco en una situación más que especial... "Me pasó algo muy fuerte con una vidente en Israel. Yo era muy, muy chica, tenía como 17 años, estaba con los 'Teen Angels' y me estaba maquillando para un show. Fue entonces cuando viene un muchacho de producción, que obviamente hablaba en español, y me dice ‘hay una persona que vino especialmente a verte'".
De esta manera, Lali empezaba a contar su historia con una vidente, que de alguna manera, marcaría su camino: "Imaginate que yo en Israel no tengo familiares. Le digo, ‘¿puede ser después del show? Faltaba media hora para que empiece y me dicen ‘no, es ahora’. Voy caminando por el pasillo del estadio, sola, y, de pronto, veo una señora, toda de negro, pelo blanco largo... tal cual como si fuera de una película".
La historia de Lali no es una historia más. Le pasó y lo vivió hasta con el suspenso de que le hablen en hebreo: "La tipa me agarra las manos, las pone en su frente y empieza a hablar en hebreo. Me decía cosas y yo no entendía. Yo miraba a este chico de producción que la miraba, emocionado. Cuando se va la señora, le pregunté qué me había dicho, y me dijo que yo estaba terminando una etapa importante en eso que estaba haciendo, pero que yo no sabía lo que se me venía, que yo le dé a la música porque ahí estaba algo muy importante para mí”, agregó".
Susana la miraba con ojos de atención total y asombrada: "Me dijo que había nacido para dar un mensaje, que por eso la vida me había colocado en donde estaba y que no era casualidad, como parecía, do del primer casting, sino que yo estaba destinada a dedicarme a esto, que nunca afloje y que no deje que nada ni nadie me baje de ahí. Y mirá vos, mal no me fue”.