Entró a la casa de "Gran Hermano" con una meta primordial, poder encontrar a su hijo... Salió del Reality, cambió su vida, pudo comenzar a trabajar de lo que le gustaba, la música... armó su banda, se hizo un lugar en la movida tropical... y el motivo principal de su lucha, no llegaba.
Hoy, algunos años después, Brian Lanzelotta puede sonreir sin temores, ese nene que él buscaba y al que sabía que debía darle su apellido porque era su hijo... finalmente lo confirmó la justicia.
Orgulloso, feliz y pleno, así lo presentaba a todo el mundo... "Hace muy poco tiempo supe q no estaba solo en este. Camino q es la vida q había alguien más q cambiaría mi vida para siempre costó,luche Muchas veces dije no sigo más ni lo vuelvo a intentar pero siempre había algo q me decía q tenia seguir en la búsqueda y valió la pena hoy me brinda su amor de hijo y me hace feliz el es ian mi hijo recién ahora despues de un tiempo de vernos y de empezar a generar el vínculo de padre e hijo tengo el placer de presentarselos".